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Como humanos

Muchas experiencias como personas tenemos, de las cuales siempre aprenderemos. Es difícil el reconocerlo. Esas experiencias las obtenemos por medio de nuestras decisiones. Pero, si decidimos el perjudicarnos a nosotros mismos, inclusive a los demás, ¿qué podemos aprender de eso? La falta de conciencias es lo que nos impediría aprender.
Aunque seamos humanos, y por ello tengamos valores, si no tenemos la conciencia necesaria para ejercer esos valores, al igual que no tenemos la conciencia suficiente para entender que nos hace falta la educación, no habría algo qué aprender. Faltaría la ética para distinguir que cometemos errores.
Si vivimos en una sociedad con este tipo de características, ¿de qué sirve que legalicemos algo del cual no tendremos el sentido propio para responsabilizarnos?
Derecho y obligación. Podremos tener todos los derechos e ignorar que tenemos obligaciones. Eso ocurre con los criminales. Más específicamente, los narcotraficantes.
Considero que se les sería más sencillo el mejorar su “negocio” con este tipo de acción.
Como humanos también nos gusta el “satisfacernos” sea como sea, aunque, bien sabemos que como personas nunca estamos conformes. ¿Exactamente a quién beneficiamos con este acto? A los que siempre han salido beneficiados. Los que empezaron con el disturbio social.
Hasta eso que “se benefician negativamente”. Y si se escucha incoherente, yo si le hallo sentido.  ¿Cuántas experiencias no hemos escuchado de este tipo de personas? Que por más que hayan logrado con sus hechos, han terminado de una forma penosa.
Meditemos correctamente sobre los pros y los contras de este tema, analicemos los resultados que podrían darse con esta toma de decisión.
Recuperemos la conciencia para practicar nuestros valores humanos.          

Medios de Comunicación

Es muy fácil para los padres criticar a los medios de comunicación por el tipo de mensaje que dan a sus hijos. Aunque, los mismos hijos buscan con qué entretenerse, no nada más los medios dan mensajes. Lo que se me ese curioso es que no se esté difundiendo más el mensaje de No a las drogas. Al parecer fue un tiempo cuando se presentó este tipo de publicidad, especialmente dirigido el mensaje a los jóvene y  a los padres.
Los medios de comunicación ya no están dando fuerza a esta postura.
Incluso, cuando se comenzó el debate de la legalización de drogas, los medios, a mi opinión, no se ven tan preocupados. Únicamente dicen lo que pasa, de manera distorcionada, y ya no dan un mensaje de que lo que ocurre perjudica a la sociedad. Es por eso que se nos es normal que haya películas y programas donde se utilicen drogas.
Ahora entendemos el porqué es tan fácil culpar a los medios. Pero, los medios estudian a la sociedad, o sea, a nosotros. Nosotros les damos de qué hablar para dar a proyectar a su mercado, que somos nosotros.
Es decir, nosotros -sociedad- actuamos, los medios captan para después proyectar el mensaje a nosotros -la sociedad. 
Los medios de comunicación tienen que vender mensajes, si a nosotros nos interesa cierto tipo de mensaje, es mercado para ellos. Después de todo, al parecer nos gusta ser el centro de atención. Si no fuera así, no estaríamos en este ciclo donde nosotros mismos nos damos un mal mensaje.

Tal vez no sea la solución

No le demos mucha importancia de cuánto tiempo se ha pensado en legalizar las drogas o no. Creo que todavía no se llegará a un acuerdo, y si se llegara a dar, no tan satisfactorio sería para todos. Nunca estamos conformes, porque la naturaleza del hombre siempre es buscar más. Independientemente de esto, nosotros –como mexicanos- no tenemos la educación y ética suficiente para tratar este punto.

Hay muchos puntos en contra, que no se han pensado debidamente, y por eso mismo no creo que sea la solución para este problema.

¿Para qué legalizar las drogas, si va a generar otros conflictos? ¿Para qué no legalizar las drogas, si va generar otras controversias sociales?

No se ha hecho análisis profundo con estos dos lados de la moneda, pero, ¿no sería mejor “dar otro tipo de moneda”?, es decir, buscar otra solución.

Se destruyeron sembradíos de droga, no funcionó como se deseaba; se hizo una lucha contra el narcotráfico, no funcionó correctamente; se ha pensado en legalizar o no las drogas, la mayoría de las personas cree que no va a funcionar en cualquiera de las opciones a elegir. Entonces… ¿realmente sería una posible solución legalizar o no las drogas? Tal vez deberíamos de enfocarnos en otro aspecto, porque , sinceramente, no creo que éste sea el camino.

Otros temas

Es cierto que la legalización de drogas no es el único tema que debería de tratar a profundidad el gobierno mexicano. Pero en ese caso, serían tantos temas que nunca se terminaría la lista. Lo malo de este gobierno es que no está organizado debidamente (por la corrupción). Aunque, si sabemos que el gobierno no va a hacer algo, ¿por qué esperamos a que haga algo, en vez de hacerlo nosotros mismos?
Muchas veces he escuchado la frase: "La unión hace la fuerza". Somos muchos mexicanos los cuales estamos incoformes por el manejo de poder en el gobierno. Si contamos a todos esos mexicano que esperan que haya un cambio en el gobierno, ¿no sería mejor que los contáramos como las personas que hacen algo por el bien del país? Después de todo ellos -me incluyo- quieren el cambio.
Admito que no es una tarea fácil. Pero también admito que somos demasiados los que quieren que se arreglen las cosas.
Es cierto que nada se mejorará al 100% , ni de la noche a la mañana. Sin embargo, es cierto que si se logra ese pequeño cambio, sería mucho más fácil hacer otros.
El problema de las drogas en México, es un tema entre muchos. Pero somos más personas que esos tantos temas que podemos hacer algo para solucionarlos.   

¿Y los padres?

"¿Y los padres?" Esta pregunta me formuló recientemente,una madre -de hecho-. Para contestar esta pregunta, dando siempre a entender que es mi punto de vista, basémonos en las familias que viven en la sierra. Un ejemplo sería la sierra de Durango. Tengo conocidos que han ido a esta sierra del país mexicano, haciendo un servicio a la comunidad, y de ellos no es excepción que nos hablen de sembradíos en las casas a donde van a hacer su servicio. Al parecer es lo más "natural" que uno llegué a estas casas y nos encontremos con muchas plantitas que se nos sería fácil reconocer.
Y volviendo así a nuestra pregunta principal, dándole otro punto de vista: ¿por qué los padres trabajan en este tipo de sembradíos? Porque viven en la sierra donde son ignorados. Las sierras del país son de bajos recursos, las familias buscan el cómo sustentarse, entonces, por eso mismo, optan por esta labor familiar. Se les es muy difícil el mantenerse en ese tipo de condiciones, de alguna manera tienen que seguir adelante, y lo que se les es más fácil realizar es sembrar algo que les da algo de sustento.
Lo curioso de esto, es que estás familias -recordando lo explicado por las personas de servicio- es que no tienen malas intenciones.
Si volvemos a cuestionarnos: "¿y los padres?" Creo que buscando la manera de sobrevivir con su familia.
Si nos basamos en las familias de altos o medios recursos, establecida en alguna ciudad del país, habría muchos casos respondiendo lo mismo: "trato de mantener a mi familia".  Pero si no nos enfocamos en hacer este tipo de trabajo familiar, sino consumo familiar, no muchas cuestiones vendrían por nuestra mente. Tomando la más general: "¿Por qué?" Y esto sería un poco más sencillo responder: gusto, tradición, necesidad, de nuevo con la ignorancia, porque sí y ya.
Si nuestras raíces inician con la familia (padre-madre), estas raíces están formando plantas invasoras en el país.
Entonces, para meditar, ¿nos importa el rol que tienen estos padres?
Con estos puntos, no queramos echarle toda la culpa al gobierno.
 

Lugares públicos

Sabemos que la droga está ahí pero ¿exactamente en dónde?
Recuerdo que en la preparatoria siempre nos inculcaban que la droga era algo "malo" y que gente que consumía eso "malo" era "mala". ¿Acaso un niño con dependencia de narcóticos, sin educación de este tipo, sabe que es malo? Al parecer no. Conforme fueron creciendo estos niños, su dependencia fue mayor, es por esto que considero que no es extraño que cuando vamos caminando por la calle nos llegue un aroma diferente; que cuando vamos a un restaurante o antro, vayamos al tocador, y alguien inhala una especie de polvo, damos la espalda. Si vamos a una fiesta de algún conocido, en su casa, podría ser muy normal que alguien diga:” ¡Vamos a fumarla!”; en cualquier institución, ya es normal que conozcas a alguien que consume droga.
Muchas veces podremos decir que nunca vamos a probar la droga, o el típico dicho:” ¡No pasa nada!” Dejémonos de tonterías. La droga está en cualquier parte. Y sabemos exactamente dónde está, aunque también sabemos el cómo ignorarla.
Es eso, la ignorancia, una de las armas más fuertes que tiene la droga. Es difícil negarlo.
Si no nos interesa que la droga esté cerca de nosotros, no decimos nada. Si nos interesa saber que la droga está cerca de nosotros –por disgusto o gusto- ¿por qué no hablamos?
En donde sea que nos encontremos, va haber alguien que tiene cercanía a la droga. O, incluso, sin tratar de ofender, tú mismo tienes cercanía.
Por ignorancia no hablamos y por la ignorancia, no nos importa lo que realmente son, pueden ser, pueden ocasionar, este tipo de sustancias.
Te dejo pensando, lector, para que tú como yo, meditemos un poco en que ignorar - a todo lo que se refiere- a las drogas, ¿vale la pena? 
En este momento, yo voy a un lugar público, ¿crees que tenga cercanía a la droga y la ignore?
En este momento, tú puedes ir a un lugar público, ¿crees que tengas cercanía a la droga e ignores?